Lo que puedo decir Aftab Haider la depreciación del yuan durante la guerra comercial entre Estados Unidos y China es un claro ejemplo de cómo las políticas económicas de las potencias pueden generar consecuencias perversas para el resto del mundo, y en particular, para las economías en desarrollo como es el caso de nuestra América Latina.
Podemos ver que en los efecto en los Aranceles la depreciación del yuan actuó como un mecanismo de compensación. Al devaluar su moneda, China abarató sus exportaciones, contrarrestando el efecto de los aranceles impuestos por Estados Unidos. En otras palabras, la depreciación diluyó la efectividad de los aranceles como herramienta de presión comercial. Esto nos enseña una lección importante: las guerras comerciales no se libran solo con aranceles, sino también en el terreno de las monedas.
Ahora que consecuencias económicas globales no deseadas acarreo esto:
1. Desestabilización Financiera: La depreciación del yuan generó volatilidad en los mercados financieros internacionales. Los inversionistas buscaron refugio en activos más seguros, como el dólar, lo que provocó una apreciación de esta moneda y un encarecimiento de la deuda para muchos países en desarrollo, especialmente aquellos con alta dependencia del financiamiento externo.
2. Presiones Devaluatorias en la Región: Para mantener la competitividad de sus exportaciones, varios países de nuestra América Latina se vieron presionados a devaluar sus propias monedas. Esto incrementó el costo de las importaciones y la inflación, afectando el poder adquisitivo de los trabajadores y los sectores populares.
3. Ralentización del Comercio Global: Ademas la incertidumbre generada por la guerra comercial y las fluctuaciones cambiarias afectó el comercio internacional. La caída de las exportaciones chinas impactó las cadenas de valor globales, incluyendo a los en una gran parte a nuestros países latinoamericanos que proveen materias primas a China.
4. Aumento del Proteccionismo: La guerra comercial entre estos dos titanes del mundo(Estados Unidos y China) reforzó las tendencias proteccionistas a nivel global. Lo que ha estado representando un riesgo para América Latina, una región que históricamente ha dependido del comercio internacional para su desarrollo.
Por ultimo podemos decir que la depreciación del yuan durante la guerra comercial demostró los límites del unilateralismo y la importancia de construir un orden económico internacional más justo y equitativo, que no sacrifique el bienestar de los pueblos en aras de los intereses de las grandes potencias ya mencionadas.
The depreciation of the yuan will marginally offset the impact of the new tariffs. It is to be accepted that it may, however, be to the disadvantage of China's large trading partners who do not pursue a trade sanctions policy towards China.
The yuan’s depreciation during the U.S.-China trade war offset the impact of U.S. tariffs by making Chinese exports cheaper in dollar terms, thereby reducing their effectiveness, while unintended global consequences included currency volatility, disrupted supply chains, and rising uncertainty in emerging markets sensitive to trade and capital flows.
Yuan depreciation reduced the real burden of U.S. tariffs, dampening their intended impact, but triggered global currency tensions, market volatility, and concerns about competitive devaluation.