School dropouts among at-risk youth can stem from a combination of factors, including inadequate family support, economic hardships, academic struggles, and negative environmental influences. Social programs can address these challenges by providing comprehensive support systems. Emotional support through counseling and mentorship, academic assistance tailored to individual needs, and socioeconomic support to alleviate financial burdens are crucial components. Additionally, programs offering opportunities for personal and professional development, such as vocational training and skill-building, can empower at-risk youth and contribute to increased school retention and academic success.

El abandono escolar entre jóvenes en riesgo de exclusión puede ser causado por factores como problemas económicos, falta de apoyo familiar, salud mental y social, y falta de recursos educativos. Para reducir esto, los programas sociales pueden ofrecer apoyo financiero, programas de apoyo familiar, servicios de salud, intervenciones escolares y acceso equitativo a recursos educativos. Es esencial abordar estos factores de manera integral para promover la retención escolar y el éxito académico entre los jóvenes en riesgo de exclusión.

‌El abandono escolar entre menores en riesgo de exclusión es un problema de gran relevancia en nuestra sociedad, que tiene como raíz la exclusión social por lo que su causa es un conjunto de factores de riesgo como podrían ser: el acoso escolar, la falta de confianza y apoyo de la familia, violencia intrafamiliar, problemas económicos que hagan que se incorporen al mercado laboral de una forma más temprana, un entorno disfuncional que refuerce los malos hábitos, problemas de salud mental no tratados adecuadamente, además de una gran desmotivación en relación al ámbito académico. Muchos jóvenes sienten que el sistema educativo no se ajusta a sus necesidades ni a su propósito en la vida, por lo que ven asistir a la escuela como una carga que no les permite avanzar. Actualmente, muchos de ellos hacen una crítica a la educación impartida ya que mide el éxito y la inteligencia mediante calificaciones y resta importancia a la inteligencia emocional o el plano artístico o musical, por consiguiente, los jóvenes con especial facilidad para estos ámbitos se sienten menos valorados y por ello desmotivados.

Los programas sociales pueden reducir esta problemática ofreciendo a los menores una gama educativa más amplia donde puedan formarse en lo que verdaderamente quieren. Sería de gran ayuda, reforzar la ayuda psicológica en los centros para tratar los problemas personales del alumno que en multitud de ocasiones impiden el buen desempeño en el plano académico, ofreciendo una educación más cercana con el equipo docente y donde se involucren más a las familias, ofreciendo programas para mejorar las relaciones familiares ya que es un punto importante en el desarrollo del menor que facilitará su motivación en la escuela. Ofreciendo oportunidades de inserción laboral para motivar a los alumnos , además de facilitando el acceso a becas para jóvenes de bajos recursos económicos, favoreciendo las actividades lúdicas y en grupo para crear un mayor entusiasmo y mejorar ambiente en las escuelas.

Frutos, A. E., Rus, T. I., & Pastor, B. A. (2019). El absentismo escolar en contextos vulnerables de exclusión. PROFESORADO, 23(1). https://doi.org/10.30827/profesorado.v23i1.9147