La pregunta busca entender cómo la violencia y los ataques por odio afectan a las personas sin hogar. Al vivir en la calle, están mucho más expuestos a agresiones, robos e incluso abusos de la policía. Muchas veces, estos ataques no se denuncian y quedan impunes. Además, como no tienen un lugar seguro donde refugiarse, están en peligro constante, ya sea por peleas, pandillas o gente que los maltrata solo por prejuicio.