Comparar la pobreza entre países usando diferentes medidas, como las líneas de pobreza absoluta y relativa, implica ajustar umbrales de ingresos o porcentajes en relación con el ingreso medio. Esto se complica debido a las variaciones en el costo de vida, las necesidades básicas específicas de cada lugar, las disparidades en la distribución del ingreso y la complejidad de los indicadores de pobreza. Para abordar estos desafíos y desarrollar estrategias efectivas, es esencial considerar el contexto único de cada país y fomentar la colaboración internacional para compartir experiencias y mejores prácticas.

Como Amartya Sen, ganadora del Premio Nobel de Economía, por reconocimiento a su trabajo sobre el desarrollo humano y sus mediciones alternativas de la pobreza que consideran aspectos más allá del ingreso económico, como la libertad y las capacidades de las personas.